El pasado fin de semana asistimos junto a nuestro nuevo colaborador, Andreas Pauli, al encuentro anual de podólogos del sur de Alemania (profesionales de baviera y Baden-Württemberg). El encuentro tuvo lugar en la región de Allgäu, muy cercana a los Alpes.
Además de reunirse para hacer balance del año, se organizó un programa de charlas y seminarios teórico-prácticos, que incluyó temas como la ergonomía durante el trabajo de recorte, temas relacionados con la importancia de la nutrición de las vacas y experiencias profesionales de algunos podólogos, que contaron cómo formaron sus empresas o qué rutinas de trabajo y organización del mismo realizan a diario.
Durante el evento se expusieron diferentes productos, entre ellos el potro ANKA que ha vuelto a causar bastante sensación entre los profesionales germanos.
Fotos: nuestro colaborador Andreas Pauli aclarando detalles del potro ANKA a colegas de profesión.
La reunión fue en el mismo sitio donde nos alojábamos todos los asistentes: un hotel familiar ("Berghof im Wald"), con restaurante y granja de vacas (perfecto para los asistentes) incluidos. Es regentado por la familia Babel, que aprovecha la leche de sus vacas para producir queso y otros derivados y ofrecérselos a los huéspedes del hotel en su restaurante.
La granja es de vacas de raza Parda-alpina, la gestionan entre dos personas (también los cultivos). Tiene unas 65 vacas en ordeño, con robot. Su media de producción es de 9.000 litros por vaca y año, con mucha grasa y proteína (para elaborar queso).
La base de la alimentación de los animales es el heno, de hecho, la ración no incluye maíz. Como curiosidad, la comida se lleva automáticamente desde el carro mezclador (al lado del granero) a los comederos, mediante una cinta transportadora (ver foto abajo).
Las instalaciones de la granja están en buen estado. La nave es de estabulación libre con cubículos, el encamado se hace a base de serrín y cal. la fachada sur de la nave, donde están los comederos, es una pared de tablas de madera que funciona como un toldo (en la foto de abajo está ya elevado): se puede bajar en los días de frío a la noche o en caso de fuerte lluvia y nieve para mantener el calor dentro de la nave. Y también se puede elevar para aprovechar los días de sol y buena temperatura. Un sistema de climatización inteligente.
Con respecto al cuidado de pezuñas, los dueños suelen atender a las cojas durante todo el año. El podólogo les visita dos veces al año, para hacer todos los animales.